Descripción del Proyecto
La actual configuración de la Plaza del Rey de Cartagena consiste en un gran espacio pavimentado con una pequeña zona verde en el lateral más cercano a Capitanía General. Dados los condicionantes estructurales (por la existencia del parking bajo la plaza), resultaba imposible dotar a la plaza de sombra proveniente de arbolado natural, por lo que, tras un análisis sobre la situación actual y sobre los distintos cambios a lo largo de la historia, nuestra propuesta pasa por plantear un diseño cuyas principales características son:
- Recuperamos la sombra que proporcionaban antiguamente los árboles a través de la propia pérgola, que es un conjunto de trece elementos que entendemos como árboles permanentes. Por tanto, el diseño de cada uno de estos trece elementos responde a la geometrización e idealización de aquellos antiguos árboles.
- La disposición en el conjunto de la plaza respeta el eje visual que discurre longitudinalmente dirigido hacia la puerta principal del Arsenal Militar. Así pues, restringimos la pérgola a uno de los laterales de la plaza, no se reparte por todo el espacio.
- Asimismo esta disposición lateral se organiza linealmente para recuperar la fachada lateral que se situaría en el lugar de la tapia de Capitanía General y termina así de conformar la plaza.
La materialización de las unidades que forman el conjunto de la pérgola consiste en unas ramas de acero que se curvan e inclinan de distintas maneras acogiendo al viandante que recorre la pérgola. Estas ramas sirven de apoyo para las piezas de polimetilmetacrilato que hacen la función de hojas y que son las que en realidad crean la sombra. Así pues, disponemos estos árboles que tienen diferentes alturas, inclinaciones y número de ramas, formando una arboleda, que con varias tonalidades de color, al igual que ocurre con los árboles de verdad, dan la sombra necesaria a la plaza al tiempo que la dotan de la calidez ambiental que actualmente no posee. Cuando pasamos por debajo de nuestra arboleda tenemos la posibilidad de sentarnos en los bancos que se dispondrán para tomar un respiro a la sombra, llevar a los niños a los juegos infantiles que ya existen y que ahora quedarán bajo la pérgola o simplemente recorrer este espacio siguiendo un camino que marcamos con un cambio de pavimentación. Es un espacio pensado para que se pueda usar todo el día, también de noche, como un atractivo más de la plaza, que ya dispone de cierta vida nocturna por la existencia de restaurantes con terrazas que los ciudadanos suelen frecuentar. Con esta intención la iluminación se integra en el propio diseño de estos elementos arbóreos y realza el ambiente cálido del que ya hablábamos y que consideramos tan importante incorporar en el diseño para conseguir reavivar el carácter de lugar agradable en el que estar un rato que tuvo la plaza en siglos pasados.
La actual configuración de la Plaza del Rey de Cartagena consiste en un gran espacio pavimentado con una pequeña zona verde en el lateral más cercano a Capitanía General. Dados los condicionantes estructurales (por la existencia del parking bajo la plaza), resultaba imposible dotar a la plaza de sombra proveniente de arbolado natural, por lo que, tras un análisis sobre la situación actual y sobre los distintos cambios a lo largo de la historia, nuestra propuesta pasa por plantear un diseño cuyas principales características son:
- Recuperamos la sombra que proporcionaban antiguamente los árboles a través de la propia pérgola, que es un conjunto de trece elementos que entendemos como árboles permanentes. Por tanto, el diseño de cada uno de estos trece elementos responde a la geometrización e idealización de aquellos antiguos árboles.
- La disposición en el conjunto de la plaza respeta el eje visual que discurre longitudinalmente dirigido hacia la puerta principal del Arsenal Militar. Así pues, restringimos la pérgola a uno de los laterales de la plaza, no se reparte por todo el espacio.
- Asimismo esta disposición lateral se organiza linealmente para recuperar la fachada lateral que se situaría en el lugar de la tapia de Capitanía General y termina así de conformar la plaza.
La materialización de las unidades que forman el conjunto de la pérgola consiste en unas ramas de acero que se curvan e inclinan de distintas maneras acogiendo al viandante que recorre la pérgola. Estas ramas sirven de apoyo para las piezas de polimetilmetacrilato que hacen la función de hojas y que son las que en realidad crean la sombra. Así pues, disponemos estos árboles que tienen diferentes alturas, inclinaciones y número de ramas, formando una arboleda, que con varias tonalidades de color, al igual que ocurre con los árboles de verdad, dan la sombra necesaria a la plaza al tiempo que la dotan de la calidez ambiental que actualmente no posee. Cuando pasamos por debajo de nuestra arboleda tenemos la posibilidad de sentarnos en los bancos que se dispondrán para tomar un respiro a la sombra, llevar a los niños a los juegos infantiles que ya existen y que ahora quedarán bajo la pérgola o simplemente recorrer este espacio siguiendo un camino que marcamos con un cambio de pavimentación. Es un espacio pensado para que se pueda usar todo el día, también de noche, como un atractivo más de la plaza, que ya dispone de cierta vida nocturna por la existencia de restaurantes con terrazas que los ciudadanos suelen frecuentar. Con esta intención la iluminación se integra en el propio diseño de estos elementos arbóreos y realza el ambiente cálido del que ya hablábamos y que consideramos tan importante incorporar en el diseño para conseguir reavivar el carácter de lugar agradable en el que estar un rato que tuvo la plaza en siglos pasados.
La actual configuración de la Plaza del Rey de Cartagena consiste en un gran espacio pavimentado con una pequeña zona verde en el lateral más cercano a Capitanía General. Dados los condicionantes estructurales (por la existencia del parking bajo la plaza), resultaba imposible dotar a la plaza de sombra proveniente de arbolado natural, por lo que, tras un análisis sobre la situación actual y sobre los distintos cambios a lo largo de la historia, nuestra propuesta pasa por plantear un diseño cuyas principales características son:
- Recuperamos la sombra que proporcionaban antiguamente los árboles a través de la propia pérgola, que es un conjunto de trece elementos que entendemos como árboles permanentes. Por tanto, el diseño de cada uno de estos trece elementos responde a la geometrización e idealización de aquellos antiguos árboles.
- La disposición en el conjunto de la plaza respeta el eje visual que discurre longitudinalmente dirigido hacia la puerta principal del Arsenal Militar. Así pues, restringimos la pérgola a uno de los laterales de la plaza, no se reparte por todo el espacio.
- Asimismo esta disposición lateral se organiza linealmente para recuperar la fachada lateral que se situaría en el lugar de la tapia de Capitanía General y termina así de conformar la plaza.
La materialización de las unidades que forman el conjunto de la pérgola consiste en unas ramas de acero que se curvan e inclinan de distintas maneras acogiendo al viandante que recorre la pérgola. Estas ramas sirven de apoyo para las piezas de polimetilmetacrilato que hacen la función de hojas y que son las que en realidad crean la sombra. Así pues, disponemos estos árboles que tienen diferentes alturas, inclinaciones y número de ramas, formando una arboleda, que con varias tonalidades de color, al igual que ocurre con los árboles de verdad, dan la sombra necesaria a la plaza al tiempo que la dotan de la calidez ambiental que actualmente no posee. Cuando pasamos por debajo de nuestra arboleda tenemos la posibilidad de sentarnos en los bancos que se dispondrán para tomar un respiro a la sombra, llevar a los niños a los juegos infantiles que ya existen y que ahora quedarán bajo la pérgola o simplemente recorrer este espacio siguiendo un camino que marcamos con un cambio de pavimentación. Es un espacio pensado para que se pueda usar todo el día, también de noche, como un atractivo más de la plaza, que ya dispone de cierta vida nocturna por la existencia de restaurantes con terrazas que los ciudadanos suelen frecuentar. Con esta intención la iluminación se integra en el propio diseño de estos elementos arbóreos y realza el ambiente cálido del que ya hablábamos y que consideramos tan importante incorporar en el diseño para conseguir reavivar el carácter de lugar agradable en el que estar un rato que tuvo la plaza en siglos pasados.